jueves, 31 de marzo de 2011

Fe como un grano de mostaza

“Dios puede hacer lo imposible, posible; lo irreal, real. Solo necesitamos tener fe como un grano de mostaza”.

Llega un momento en nuestras vidas en que nuestras fuerzas se agotan y pensamos que no podemos encontrar una solución; que nuestra crisis, problema no tiene alternativa. ¿Por qué pasamos todas esas cosas? ¿Dónde está Dios en esos momentos? Son preguntas que no s cuestionamos muchas veces. Pero, déjame decirte que Dios siempre estuvo y está ahí, esperando que le dejes obrar. Esperando que dejes que haga posible lo que para ti no lo es, que haga real aquello que parece ser una ilusión. Solo necesitas tener fe y creer que Él es real y todopoderoso para obrar sobrenaturalmente.

Muchas veces nuestra naturaleza humana nos hace creer y pensar que somos capaces de resolver nuestros problemas por nuestras propias fuerzas, sean éstos laborales, económicos, familiares o espirituales y vamos construyendo en nosotros una barrera de autosuficiencia, en donde Dios no tiene cabida. Luego, cuando nuestras fuerzas nos fallan, nuestro mundo se viene abajo y la angustia nos agobia.

Nuestra capacidad y fuerza tienen un límite. Pensar que somos autosuficientes solo nos llevará al fracaso y definitivamente son en estos momentos críticos en los cuales nuestra dependencia al Señor es puesta a prueba. O me dejo invadir por la aflicción al no ver una pronta solución, o confío en el poder milagroso de Dios y me conduzco en paz y con fe. Sé que es difícil, pero lo único que Dios quiere es que tengamos fe como un grano de mostaza para mover la montaña; no nos exige algo imposible y así como dice en Lucas 8.27, lo que es imposible para el hombre es posible para Dios.

Aprendamos a vivir en lo sobrenatural y dejemos que Dios mueva esas montañas que agobian nuestras vidas. ¿No es acaso el Dios que creemos el mismo que abrió el mar rojo, que resucitó muertos, curó leprosos, dio vista a ciegos, alimentó a miles? ¿Qué son nuestros problemas frente a ellos? Nada hay imposible para Dios. Él solo quiere que tengamos fe y comenzaremos a ver cosas que ojo no vio ni oído oyó. Atrévete a creerle, deja a un lado tus fuerzas naturales y comienza a vivir de la provisión de Dios, en lo sobrenatural. Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece.

No hay comentarios:

Publicar un comentario